lunes

Billetes falsos

Aunque no sabía qué significaba, Tomás siguió tratando de ser un actor de verdad.

Caminó con un arma cargada por la calle.
Salió un fin de semana completo vestido de mujer.
Se subió a un poste de teléfono y se quedó encaramado tres días y tres noches como un estilita.
Se coló por la ventana en casa de sus vecinos.
Se tumbó en mitad de una calle como si fuera un moribundo.
Sedujo a una mujer mayor que compraba en el mercado.
Se hizo pasar por detective privado.
Pasó billetes falsos.

Nazaré Lascano, Cuentos de Parque Chas


No hay comentarios: